Optimismo y salud

Me gustaría que no olvidásemos, la relación que existe entre  el optimismo y la salud.  

Lector, si a ti, ¿sabes que eres un privilegiado? si estás leyendo estas páginas es que estás vivo, la vida es un milagro, en este momento tú tienes ese bien preciado. Los niños saben mejor que los adultos, cual es el ingrediente para mantener una vida llena de satisfacción, la alegría, la ilusión y esa capacidad para sorprenderse de todo lo que ocurre a su alrededor.Optimismo se define como: “la actitud de la persona que ve el aspecto más favorable de las cosas y espera que suceda lo mejor“. Si observas con detenimiento, esta es  una cualidad que tienen todos los niños, hasta que se hacen adultos, en algunas ocasiones, hacen todo lo contrario que cuando eran niños, en vez de ver el lado bonito de la vida, buscan constantemente el lado oscuro. Lo bueno de todo esto, es que es, una opción, tú decides, sólo tú, nadie más que tú, el mundo está frente a ti, ponle  color, tu salud te lo agradecerá. Si tiene la sensación de que todo lo anterior son sólo palabras fáciles, relacionadas con el optimismo y la salud,  voy a dar datos científicos.

 La clínica mayo en (Rochester Minnesota EEUU) durante 30 años, realizaron un estudio con cerca de mil pacientes, llegando a conclusiones asombrosas. Los optimistas gozaban de mejor salud y vivían más años, que los que no lo eran. Este estudio demostró que estas personas, tenían menor probabilidad de padecer depresión y patologías relacionadas con el sistema nervioso, también toleraban mucho mejor los procesos de estrés. Otro estudio, realizado por el centro psiquiátrico holandés ggc delfland demostró, entre mil pacientes con edades, entre 65 y 85 años que  los optimistas tenían un 23% menos riesgo de fallo cardiaco.  También intuimos la relación  entre optimismo, cáncer  y esperanza de vida. Los oncólogos saben la importancia que tiene la actitud de la persona, frente a la adversidad, investigadores canadienses especializados en oncología, llegaron a la conclusión, que la personalidad puede afectar notablemente el bienestar físico y mental del paciente (journal of clinical oncology).

Nuestro sistema inmunológico, formado básicamente por lo glóbulos blancos de la sangre, puede sufrir cambios profundos, debido a variaciones en la actividad cerebral, el sistema nervioso, el hormonal, se encargan de trasmitir al organismo la señales  generadas por nuestra mente. en los últimos años los estudios, han demostrado que las hormonas segregadas en glándulas y transportadas a través de la sangre, tienen una capacidad enorme ,para modificar todo nuestro organismo, el ejemplo más claro de cómo afectan las hormonas a nuestro organismo está en el cortisol, esta hormona segregada por las glándulas suprarrenales a partir de órdenes cerebrales ante situaciones estresantes, esta hormona ejerce una acción positiva preparándonos ante la adversidad la lucha o la huida. Pero en  concentraciones elevadas, es capaz de cambiar el número y la función de lo glóbulos blancos, disminuyendo la resistencia ante las  infecciones y preparando el organismo para padecer cualquier enfermedad, ya que el sistema inmunitario está trabajando continuamente y cuando verdaderamente se necesite estará extenuado y no podrá responder como se espera.

 

 

En los tiempos en los que vivimos parece difícil ser optimista. Alguna vez nos preguntamos si un  optimista nace, o por el contrario, puede aprender a serlo. Creo que las dos formas son posibles, si tiene la suerte que su papá y su mamá le transmitieron, la facilidad por ver el lado bonito de la vida, te felicito, si no fue así,  tienes  la llave para  cambiar patrones de tu vida, que te incomodan y te restan felicidad, dicho de otra forma,  todo se aprende, sólo depende del individuo.

Todos necesitamos dar sentido  a nuestra vida, sentir que nuestro tiempo es útil, pertenecer, queremos sentirnos bien con nosotros mismos y con la gente que nos rodea. Para que esto sea así, necesitamos crear un contexto acorde. Los tulipanes no crecen en los desiertos, necesitan un contexto para crecer. Lo mismo pasa con  el bienestar, el optimismo, como antes comentábamos se puede aprender, es necesario un contexto, un clima que lo propicie, recuerda a los optimistas, les gusta rodearse de optimistas, también pasa con los pesimistas, te has dado cuenta que detrás de un pesimista siempre hay otro pesimista. No te conformes busca, como con un radar, personas que te puedan enriquecer la vida, que aporten, que construyan, que sean interesantes.

Cambia lo que no te sirva, te sugiero que valores, cuáles son las áreas de tu vida que no te gustan, cuales te gustaría que fuesen diferentes, que estuviesen mejor. UNA CADENA ES TAN FUERTE COMO SU ESLABON MAS DEBIL. Cuando reforzamos el eslabón que creemos que está débil, reforzamos toda la cadena. Tienes el privilegio de elegir por donde caminas, puedes elegir caminos fáciles o caminos eficaces, unos tardan demasiado en llegar y otros llegan más pronto. No olvides diferenciar entre placer y felicidad, observa que muchas veces el placer no termina en Felicidad, pero la felicidad si se acompaña placer. El bienestar para ti y también para los demás es la clave. Entre quedarte quieto o jugar yo deseo que tú juegues, entre placer o felicidad yo deseo de corazón que seas feliz. Para ir en busca de tus necesidades se necesitan dos cosas: querer y hacer, con el pensamiento sólo, no basta necesitas, ACCION.

A veces el ser humano tiene tendencia a quedarse en el pasado, si es así valoralo, desde luego el pasado es importante, pero nunca tanto como para modificar tu presente. Sobre todo ten en cuenta, todo lo vivido, todo lo aprendido, quédate con lo bueno, con la magia de tus vivencias, no vivas la vida de otros, la tuya es mucho más interesante y piensa: como diría un optimista “LO MEJOR ESTA POR LLEGAR”

Juanjo Mariño Benito